miércoles, 3 de noviembre de 2010

Carta XI

Hola Sr.Fuego:

Hace mucho que no te escribo, y eso que dije que serías como mi diario personal. Supongo que tengo que ponerte al día:

Hace poco estuve un poco mal, triste, apagada, fría... Pero ya estoy mucho mejor, muchisísísímo.
Supongo que se deberá a la distancia, o a que, en algunos momentos, me siento desplazada, como una extraña entre la gente de aquí. Es normal, si lo piensas, ellos también han empezado de cero, pero pocos se han movido de sitios tan diferentes, yo vivía en un pueblucho lleno de turistas, y ahora estoy en una ciudad. Todo es más grande, más rápido, más caóticamente estresante, pero me gusta. 
Creo que es eso lo que me motiva a seguir adelante, el descubrir todo lo que este nuevo "hogar" me puede dar. 
Aún así, a menudo pienso en vosotros, sobretodo cuando salgo por ahí, a dar una vuelta o por la noche, y me paro a pensar un poco en cada uno de vosotros (chispas, el chico sin ego, mi cachorrillo werewolf, ...todos). 

Las clases me van bien, podrían ir mejor, para que negarlo, pero reconozco que tampoco me he esforzado mucho para que mejore, por lo que a partir de ahora me pondré un poco las pilas, y a trabajar. ¡Al turrón!

Espero que te alegre tener otra cartita ante ti, aunque hablemos a veces, no es lo mismo ¿no?
Esto es un poquito más especial.

Te quiero muchísimo. Cuídate. Sigue ardiendo para mí.





Miro al cielo, y veo la luna entre las nubes, y sé que tú también la estarás admirando, y sonrío. Siento un cálido abrazo del frío viento, porque se que entre la brisa están los abrazos que tanto ansías darme y la distancia tanto te lo impide. 
Cuando llueva acuerdate de mí, porque yo lo haré de ti.






Y entre las llamas del infierno seré feliz, porque me encontraré rodeada por los brazos de aquellos demonios a los que tanto quiero.

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